Rusia implementará “huellas digitales” para hacer cumplir los derechos de autor en línea
“La toma de huellas digitales es un sistema que puede utilizarse para rastrear una propiedad deseada mientras se excluye la posibilidad de distribución ilegal”, informó el viceministro Violin.
Según declaró el viernes 20 de marzo el viceministro Alexei Violin, el Ministerio de Comunicaciones y Medios de Comunicación creará un registro con información sobre los titulares de derechos de propiedad intelectual de Rusia. La Agencia de Información Legal Rusa (RAPSI, por sus siglas en inglés) informa que es probable que dicho registro se base en el principio de la toma de huellas digitales y que se lo utilice para “rastrear y proteger archivos con derechos de autor en línea”.
El viceministro Violin declaró que muchos titulares de derechos tienen miedo de proporcionar una huella digital de su propiedad intelectual por temor a que pueda ser pirateada.
Violin agregó que inicialmente el ministerio creía que no debería haber ningún monopolio en esta industria, que la distribución de la propiedad intelectual en el registro debe ser voluntaria y que debe satisfacer los intereses de todo el sector.
La toma de huellas digitales es una técnica que utiliza softwares para identificar y extraer componentes únicos de video digital o archivos de audio. Las “huellas” únicas luego pueden utilizarse para rastrear contenido en línea. Los estudios de cine usan huellas de video digital para localizar copias de sus películas en varios sitios web y hacer cumplir los derechos de autor, mientras el Content ID de Youtube y el Copyright Match de Vimeo utilizan la herramienta de toma de huellas digitales de audio Audible Magic para identificar el audio utilizado en videos subidos y comprobar si hay violación a los derechos de autor.
La Unión Rusa de Titulares de Derechos de Autor (RUC, por sus siglas en inglés) había propuesto recientemente introducir “un impuesto a internet”, una solución exhaustiva que sugiere que todos los usuarios paguen automáticamente al acceder a contenido.
La ley anti piratería rusa entró en vigencia el 1 de agosto de 2013. Entre otras cosas, hace responsable a los proveedores de servicios de internet y a las plataformas de alojamiento de la distribución de contenido pirateado en sus plataformas y de emitir advertencias y desmontar páginas y sitios web que contengan música, videos y otros materiales pirateados. En mayo de este año entrarán en vigor nuevas modificaciones de la ley, lo que permitirá un bloqueo más rápido de los sitios web con contenido pirateado.